El ataque a una parada y a un autobús urbano obliga al Ayuntamiento a suspender la línea de refuerzo entre Santa Ana y el Hospital San Agustín
El ataque a los elementos de mobiliario público o paredes es uno de los problemas más acuciantes de la ciudad, con decenas de incidencias cada año relacionadas con el vandalismo.
Además, supone un desembolso continuo para el Ayuntamiento de Linares, que dedica anualmente miles de euros a reducir el impacto de estos comportamientos.
Los destrozos, robos, quema de contenedores y pintadas se suceden durante el año y generan un clima de crispación entre los vecinos y la propia Administración local.
El último acto vandálico contra una parada y un autobús urbano ha obligado al Consistorio a suspender el servicio de refuerzo de la línea entre Santa Ana y el Hospital San Agustín, con salida a las ocho de la mañana desde el barrio. «Con este tipo de actos, lo único que se hace es perjudicar a los linarenses y a los usuarios del transporte público», lamenta el concejal de Infraestructuras y Servicios Municipales, José Luis Roldán, quien condena este tipo de comportamientos incívicos. «Esto es intolerable», denuncia.
Por fortuna, el ataque no acusó daño personales, pero sí materiales que ahora tendrá que reponer el Ayuntamiento para reestablecer el servicio de refuerzo de esta línea, que estará operativo de nuevo a partir de este miércoles, según apunta el edil.
La Policía Local hace un llamamiento a la colaboración ciudadana con el fin de frenar estos actos de vandalismo urbano. A través de la Jefarura se pide que toda aquella información que se pueda aportar será de ayuda para solventar un problema que trae de cabeza a los vecinos y a las autoridades municipales.
30.000 euros por los disturbios del 13 de febrero
Conviene recordar que los disturbios ocurridos el 13 de febrero en protesta por la brutal paliza propinada por dos policías nacionales fuera de servicio a un padre y a su hija menor costarán 30.000 euros del dinero de todos los linarenses, a lo que hay que sumar los destrozos en parques y jardines, así como la quema de contenedores que se producen a lo largo del año.